Una alianza estratégica para enfrentar el exceso de velocidad
Con el respaldo de Bloomberg Philanthropies y la participación activa de Vital Strategies, la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV) lanzó la campaña nacional “Baja la velocidad”, una estrategia enfocada en concientizar a los conductores —especialmente a motociclistas— sobre los peligros del exceso de velocidad. La iniciativa se enmarca en el plan de reducción de siniestralidad vial promovido por el Gobierno Nacional y se dirige a uno de los factores de riesgo más recurrentes en la seguridad vial en Colombia: la conducción por encima de los límites establecidos.
¿Por qué hablar de velocidad?
De acuerdo con datos del Observatorio Nacional de Seguridad Vial y reportes internacionales, el exceso de velocidad está presente en un porcentaje significativo de los siniestros viales con consecuencias fatales o graves. En Colombia, los motociclistas representan el 62% de las víctimas mortales en las vías, y la mayoría de los incidentes se concentran entre hombres de 21 a 35 años. Además, 6 de cada 10 motociclistas exceden regularmente los límites de velocidad.
Las interacciones más frecuentes y peligrosas incluyen choques entre motociclistas y peatones —en los que 4 de cada 6 peatones fallecen— así como colisiones con vehículos particulares y volcamientos.
Objetivo: cambiar la conducta a través del control y la empatía
La campaña “Baja la velocidad” no se limita a alertar sobre los riesgos. Su objetivo es modificar la percepción de la velocidad como una conducta riesgosa, aumentar el conocimiento de las consecuencias, y reforzar la percepción de vigilancia y sanción. Para lograrlo, se combinan acciones de control en vía con una narrativa emocional que humaniza la prevención.
Uno de los ejes creativos más destacados es el uso del testimonio de una agente de policía real, quien aparece en los comerciales explicando por qué los controles no son castigos, sino medidas para salvar vidas.
¿Qué quiere lograr la campaña?
- Que los conductores comprendan que la velocidad pone en riesgo no solo su vida, sino la de los demás.
- Que respetar los límites sea percibido como una forma de protección, no de restricción.
- Que las cámaras y los controles no sean vistos como enemigos, sino como aliados que previenen tragedias.
El mensaje principal se centra en la responsabilidad individual y colectiva: “Con la velocidad no hay segundas oportunidades”.
Una visión integral de la seguridad vial
La campaña “Baja la velocidad” se suma a otras estrategias de la ANSV en el marco del Plan 365, y refleja el compromiso institucional por reducir las cifras de siniestralidad en Colombia. Esta apuesta no solo busca modificar conductas en el corto plazo, sino transformar la cultura vial del país, generando conciencia, empatía y respeto por la vida en la vía pública.
Desde caminosyvidas.com celebramos este tipo de acciones que articulan comunicación, evidencia y control en una misma dirección: salvar vidas.